Una excursión en barco por el Lago de Como es una experiencia que va mucho más allá del simple turismo, es un viaje en el tiempo y en la belleza natural. Las aguas cristalinas del lago reflejan las imponentes montañas circundantes, creando un escenario que parece sacado de un cuento de hadas. Este paisaje encantador se enriquece con las elegantes villas que salpican las orillas, cada una con una historia y un encanto únicos.

Desde el momento del encuentro en el muelle, el guía experto nos transporta a otra época, con historias que tienen sus raíces en la antigüedad y el folklore local. Se habla de Julio César, quien parece haber dejado su huella también en estas tierras, y de las furiosas batallas navales que marcaron el lago. Las vicisitudes de los poderosos cardenales que, fascinados por la belleza del lugar, hicieron construir fastuosas villas y vastos jardines barrocos, añaden un toque de misterio y grandiosidad al relato. Cada pueblo, cada villa que se divisa durante la navegación evoca episodios memorables, entrelazados con apasionantes eventos históricos.

Entre las paradas imperdibles, Varenna destaca como una joya en la costa oriental del lago. Este antiguo pueblo de pescadores ha sabido conservar intacta su autenticidad y su encanto. Pasear por sus estrechas calles significa sumergirse en una historia rica y estratificada, donde cada rincón cuenta un pasado glorioso. El castillo que domina el pueblo ofrece una vista impresionante, mientras que el puerto protegido, con sus iglesias decoradas con frescos y las elegantes villas, testimonia la importancia histórica y cultural de este lugar, hoy sede de prestigiosos congresos internacionales.